domingo, 1 de enero de 2012

Mi Ave del Año 2011

Foto: Benjamín Pérez.
Que ¿cual ha sido mi Ave del Año 2011? Pues hay varias opciones: la única especie nueva que vi este año, que fue la serreta grande, que, a saber por qué, era una de esas que siempre se te escapan por mucho que hayas transitado sus dominios; el buitre leonado, al cual dediqué muchas jornadas de esfuerzo para tratar de reducir los problemas que le amenazan; el ruiseñor, que nos arrulló las noches en vela de los días más delicados; o, con la que finalmente me quedo como Ave del Año: el arrendajo que pude disfrutar durante una larga y mágica observación, en un robledal de otoño, durante sus andanzas de sembrador de bosques. Había observado más veces este trajín, pero nunca durante tanto tiempo; invisible yo a sus ojos con mi mejor cara de tronco, el pájaro iba y venía con una bellota nueva cada vez, enterrando su tesoro entre la hojarasca, procurando guardar para cuando no hay: despensas que la mala memoria convierte en nuevos retoños y al arrendajo en un plantabosques. Un plantabosques, pensé yo, que con su generosidad sonroja a la avaricia arboricida de los hombres...
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...