(Foto de Cinciallegra Birdgardening a través de Birdcam Italia) |
Construidos por uno mismo o adquiridos en una tienda especializada, los comederos han de instalarse a salvo del acceso de los gatos y otros posibles predadores. Los repostaremos con distintas mezclas de grano (pipas de girasol sin tostar, preferentemente pipa negra, alpiste, mijo, negrillo, nabina, cañamón, alazor, cacahuete pelado...), colocando en otros soportes, pero sin mezclar con el grano, alguna manzana o pera, por ejemplo, y algún recipiente o comedero especial de sebo o manteca. Es preciso limpiar bien los comederos una vez por semana, para evitar que los restos de comida se estropeen y provoquen alguna intoxicación o infección a las aves.
Bueno, pues llegó el momento de instalar el comedero, de ayudar a las aves y ¡disfrutar observándolas de cerca! ¡Mucha suerte y ya me contarás!