domingo, 31 de julio de 2011

Primeras cigüeñas


Tras el día de tormentas de ayer y con el cielo aún de un gris plata borrascoso, hoy pasan, lentas, plácidas, inmemoriales, las primeras cigüeñas blancas. Y recuerdo los días de fin de julio y agosto allá, en el Estrecho, bajo la sombra de un cielo nublado por los bandos inmensos, inabarcables, de las cigüeñas...

viernes, 29 de julio de 2011

Entre okapis y pigmeos


Entre okapis, bonobos, pangolines y pigmeos... Larga y entretenida noche de preparación y redacción del capítulo de las selvas ecuatoriales africanas para la enciclopedia... Y, desde la cuenca del Congo al bosque nublado de los volcanes Virunga...

martes, 26 de julio de 2011

El silencio de los vencejos

Foto: Pau Artigas.
De repente, como cada Julio, en ese día escogido de finales de mes, los vencejos locales han dado la gran espantada, emprendiendo su viaje anual hacia el sur... Y han quedado las plazas, las torres, las calles estrechas, el cielo de los pueblos llenos del silencio de los vencejos, como desnudos del griterío alegre de sus incansables ruedas aéreas; un silencio espeso como el aire recalentado de la canícula estival, que apenas hiende y llena ese canto de siesta de las cigarras...

sábado, 23 de julio de 2011

Notas de campo de los amores de invierno


Hojeando algunos cuadernos y diarios de campo, en la quietud de estas horas, encuentro alguna escena invernal para darle un contrapunto al calor de esta noche de verano. En el cuaderno anoto el dato escueto, preciso, de la observación, con los detalles de interés para el biólogo; en el diario, en cambio, tan personal, tan diferente, las notas se confían a las alas de la emoción:

"Por las hondas quebradas del invierno, en un claro de luna, plateado el monte, gruñen dos enormes jabalíes canos ante la piara de hembras, temblando la tierra en torno, lanzándose con los afilados colmillos terribles derrotes, brotando el aliento de sus lomos. El zorro, más delicado en los asuntos del amor, aúlla incansable su quejumbroso alarido de bruja antigua, sin necesidad de llegar a los dientes, ofreciendo a la noche una serenata melancólica y bella. Sopla, inconfesable, el cierzo de las pasiones invernales."

viernes, 22 de julio de 2011

Mochuelos en el tejado

Foto: Artur Mikołajewski
Todo maullidos, carcajadas y revuelos blandos, ya están de nuevo, como cada noche de este verano caprichoso y lento, los mochuelos cebando a sus pollos en el tejado...

martes, 19 de julio de 2011

La aventura de una nueva enciclopedia


Me resistía a meterme en estos líos de nuevo, pero al final he aceptado: participaré en una nueva enciclopedia de Naturaleza de la editorial Planeta. La tercera aventura enciclópedica en la que me veo envuelto. Como la anterior para la misma editorial, también esta con un ámbito mundial... Comenzaremos nuestro viaje literario, que sabemos donde empieza pero no dónde termina, cargando la mochila de escribir con los cuadernos y vivencias que guardo del África profunda, partiendo de esta escena de mi encuentro con las Cataratas Victoria...

domingo, 17 de julio de 2011

Camino del sur

Foto: Raul Baena Casado.
Esperando que mueva la brisa del mar; el aire está hoy completamente quieto: calor, luz, campanas de domingo y banditos de abejarucos trinando alto, perdidos en el azul, camino ya del África lejana...

sábado, 16 de julio de 2011

La golondrina herida vuela


Ha sido en casa la sensación y la alegría de estos días, esta joven golondrina que encontré recién golpeada por un vehículo en medio del camino que lleva al pueblo. Contusionada pero sin rotura alguna, necesitaba del reposo y seguridad suficientes para recuperarse, que encontró en lo alto de las buganvilias del porche de la terraza, donde las chiquillas se despidieron de ella anoche, ya muy repuesta. Esta mañana temprano, trinando animadamente, ha echado por fin a volar... ¡Adiós golondrina!

jueves, 14 de julio de 2011

La sombra de las salamanquesas


¿Una salamanquesa también sobre la luna llena? No me extrañaría, esta noche están por todo... Simpáticos e inofensivos dragoncillos de gritillo gutural, casi humano, de las dos especies ibéricas, la común y la rosada, corretean por las paredes y los techos exteriores de la casa, dando un susto a las visitas con una sombra enorme, agigantada cuando se acercan lo suficiente a una farola...

Un poco de seriedad

Foto: Luis Egido.
No, estornino, no; insiste cuanto quieras en imitar al petirrojo sobre el cielo rosa del amanecer, pero a ese reclamo le falta y le sobra algo. Además, recortado sobre la antena, negro, alto, piquilargo y vertical, poco aspecto de bolita saltarina y pechirroja tienes. Podrías esconderte al menos...

miércoles, 13 de julio de 2011

Pájaros del color del rincón donde se escribe


Escribiendo de pájaros alguna tarde en este rincón, me he dado cuenta de que tienden a salir de la pluma las especies que la vivencia o el recuerdo asocian al color y el calor del lugar donde se está: pardos pájaros de las tardes de verano, carriceros, alzacolas, ruiseñores... se adueñan del papel y campean libres por las cuartillas teñidas de la luz cálida estival...

domingo, 10 de julio de 2011

Colonias de focas en el Mediterráneo ibérico


No sé porqué, siempre que intento imaginar cómo fueron en su día las extinguidas colonias de foca monje en el Mediterráneo ibérico, acude a mi mente la imagen de una playa de Benidorm en hora punta...

Colonia de leones marinos en Nambia.

viernes, 8 de julio de 2011

El farol de sandía y el mochuelo


Este anochecer plácido, quieto y sin brisa, todo reclamos de mirlos y risas de niños, es la fiesta de los faroles de sandía, entre los que se cuela también algún melón. Con la noche entrada, las hileras de niños y familiares con sus faroles de un día recorren, entre risas, las calles y afueras oscuras de los pueblos... Una noche de esas, como si fuera ayer, recuerdo de crío ver mi primer mochuelo... "¡Hay un muchuelo en el cable de la luz!" Me dijeron mis abuelos al salir de su casa. Y yo creía ver allí, en la distancia y en lo oscuro, un duendecillo sorprendido, agazapado en su redondez...

jueves, 7 de julio de 2011

Una rana en la garganta

Autor: Pacomartinezfoto
Pasan croando, hacia el sur de esta noche fresca, unos Martinetes por encima de casa. Parece que se les quedó en la garganta, dándoles esa voz, en venganza, una de las ranas que engullen...

miércoles, 6 de julio de 2011

Grandes verdades sobre la observación de aves (8)


Con la primera multa, la mayoría de observadores de aves aprenden que parar el vehículo en el arcén de las carreteras está prohibido... y también que cuando nos pille un agente de la autoridad en esta situación, en lugar de estar observando una hermosa ave raramente vista en la región o las especies objeto de nuestro censo, lo que sucede es que nos ha dado un repentino mareo que nos ha obligado a parar; fuerza mayor...

martes, 5 de julio de 2011

Una bruja loca y despeinada


Prospectando un cortado rocoso en busca de buitres, me sorprende, desde una repisa, un Alimoche mirándome, asomado como un vecino fisgón con su cara de bruja loca despeinada y con ictericia, como recién levantada de una noche movida de carreras de escoba sobre un cielo de estrellas cómplices y borrachas...

lunes, 4 de julio de 2011

¿El desierto de Sonora o más acá?


¿Aúlla un coyote a lo lejos? ¿Se esconde el mochuelo excavador en su túnel y escapa a la carrera el correcaminos? ¿Repta el monstruo de Gila bajo la mirada del halcón de la pradera?¿Son las plumas de un apache acechante esta sombra que nos sigue?... No, más bien es un zorro el de los gañidos, un mochuelo europeo se resguarda en la hura de un conejo, y corretea los caminos la cogujada. Es un ocelado el lagarto y, el halcón, un peregrino... ¿Y el apache? Un viejo extra de aquellas películas de indios y vaqueros que se rodaron aquí, al que siempre le ponían en el mismo bando por su nariz de jefe indio (muy práctica: qué buena sombra para estos descampados), y que nos acompaña en nuestra visita por el desierto ibérico de Tabernas, en Almería.

sábado, 2 de julio de 2011

Ponte al día en Etología: aquí un buen libro gratis

La Etología, la de verdad, la que es una Ciencia (el estudio de la conducta), es mucho más que el sistema de normas de "autoayuda" a lo "Supernanny" para la domesticación de animales que algunos piensan. En espectáculos con animales, programas televisivos de moda, revistas caninas y otros medios es frecuente, sobre todo por parte de adiestradores de animales silvestres y domésticos, la referencia constante a la Etología empleando términos y conceptos exclusivamente de la Etología clásica, desfasados ya desde finales de los años 70 y primeros 80. Aquella concepción primaria, simple y mecanicista, quedó apartada hace décadas ya de las Ciencias del Comportamiento, enfocando el estudio de la conducta desde la perspectiva evolutiva y profundizando su desarrollo y alcance desde lo que se ha dado en llamar la Ecología Comportamental o del Comportamiento. Pero la mayoría de "adiestradores de bichos", al menos los que se escuchan, han quedado atrapados en el imprinting y el reflejo condicionado, perdiéndose -y con el riesgo de que les hagan perderse también a quienes acuden a sus espectáculos, les ven o les leen- la dimensión real y la riqueza de matices de la Etología de verdad..

Una buena noticia que nos acaba de dar a sus miembros la Sociedad Española de Etología (SEE), es que han puesto a disposición de todo el mundo, a través de su web, el PDF del libro Etología. Introducción a la Ciencia del Comportamiento, editado por J. Carranza. Es una obra que ya tiene sus años pero que, sin embargo, nos pone al día sobre la concepción actual de la Ciencia del Comportamiento, esforzándose incluso en comparar conceptos y términos de la Etología Clásica con los de la actual, señalando qué ha quedado atrás, para el olvido por desfasado o probadamente equivocado, y qué nuevas teorías han ocupado su lugar. Una excelente oportunidad para ponernos al día (o casi, pero infinitamente más que el "adiestrador de bichos" al uso) en Etología. ¡Disfrutadlo!

viernes, 1 de julio de 2011

Por los caminos del verano


Acompañan al caminante, en la tarde de julio, las cunetas estrelladas del hondo azul de la flor de la achicoria, acariciando sus ensueños por los caminos polvorientos del verano...
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