domingo, 13 de noviembre de 2011

Baby-Birding: Observación de aves con bebé


Estas tardes soleadas nos vamos la pequeñina y yo, ella en su cochecito y yo con mis binoculares, a ver pájaros por los caminos de los huertos y los parques y jardines cercanos, en una modalidad de la observación de aves que nos ha dado por llamar Baby-Birding u observación de aves con bebé, y que nos está dando muy buenos resultados. Desgrano a continuación los materiales y técnicas recomendados.

¿Qué se necesita para practicar el Baby-Birding?: Un bebé en su carro o cochecito (más su kit de utensilios varios: biberones, termo y leche, pañales, toallitas...) unos binoculares, tranquilidad y capacidad de sorpresa.

Las técnicas: A) La búsqueda directa, consistente en pasear despacio, tratando de localizar las aves a nuestro paso para luego aproximarnos y observarlas mejor, para lo cual ayuda el esconderse incluso tras el cochecito (resulta curioso cómo las aves dejan acercarse más a un observador que empuja un cochecito que a otro que no). B) La espera o aguardo, que nosotros realizamos en bancos de parque junto a alguna fuente que ejerce de abrevadero y baño, o bien junto a un árbol o arbusto a rebosar de frutos atractivos para las aves, como por ejemplo un almez o un campo de gramíneas que nos gusta visitar siempre que podemos. De modo que toda una procesión de especies acuden hasta nosotros sin necesidad de movernos. C) La estación de observación, que simplemente es acomodarnos en un punto con buena visibilidad del horizonte y del cielo, y dedicarnos a barrerlo con la mirada y los prismáticos, con lo cual detectamos muchas aves en vuelo, como por ejemplo las que están en paso. Aquí, el cochecito se ha revelado como un "trípode" ideal sobre el que apoyar los codos o directamente los prismáticos para mantener más tiempo los barridos. Y c) la técnica mixta, que es una combinación de las anteriores y que suele darnos los mejores resultados, con listas muy completas de especies.

Suerte a quienes se animen a practicar esta modalidad, y, sobre todo, no os olvidéis que lleváis un bebé, que es quien al fin y al cabo manda y el que debe estar a su gusto en todo momento; y si además emite esos gritillos tipo trino que parece que atraen a los pajarillos...
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